Sueño en una tarde de otoño
fresca y naranja, del naranja
de las hojas de la acacia
que son nuestra alfombra en la ciudad.
El sol está cansado y débil,
ya no puede contener los vientos,
que te hacen cruzar los puños bajo el cuello,
entornar los ojos, y acurrucarte
en tu suave rebeca de lana gris.
Paramos, hablamos, despacio, de nada en concreto, sentados
en la placeta que los niños del verano abandonan,
dejan los columpios balanceándose solos, llorando,
metálicos, por el paso del tiempo.
Corren a sus casas a por la merienda,
y el sol les cae mientras la toman.
Después ya no saldrán, se quedan en casa
pondiendo su nombre en cuadernos que huelen a nuevo.
Y todo vuelve a su sitio, año tras año.
En la orquesta de ciudadanos, el tiempo es batuta.
Estamos sentados y todo alrededor baila,
en la tarde de otoño, fresca y naranja.
6 comentarios:
Me gusta ;)
Acabo de recordar esas tardes de juego cuando era pequeña por mi barrio...aisssh
Nos hacemos mayores...:)
Voy a acer de esto mi blog:
Clase de Dibujo Artistico
Mojad los pinceles y cojed la paleta.
Mezclad un cielo color paloma
una espesura ocre y miel
y agua cenicienta e hialina.
¿Que obtenemos?
El Otoño, señores, ¡EL OTOÑO!
¡¡qué bien esa vena tuya tan guardada de hacedor de versos... ¡¡qué me gusta el otoño...
Varios me hablais de otonios, si hubierais visto el que yo he disfrutado este anio...
Un besico Maese (ah! gracias por la felicitacion!)
no te imaginas castorcitos corriendo por enmedio de todas esa hojas... aque sí? ;)
Yo sí me los imagino.. jeje!
Uhm.. el otoño llega a mi vida. No que esté en mi edad otoñal, que Malak es vieja pero no tanto..
Sino que, esos momentos que refleja el otoño: de caída de hojas, melancolía, mantita en casa tirá en el sofá sin saber qué hacer, lágrimas (sobre todo esto)... parece que se han instalado en mi vida.
A ver si con el Invierno se me congelan las ideas y en la Primavera me crecen otras.
Un beso super Rusti
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